En el desarrollo de un niño es importante que esté presente el juego simbólico. Esto les permite expandir su pensamiento pudiendo imaginar situaciones ajenas a la realidad, pudiendo así discernir entre lo que es real y no lo es.

Asimismo, el juego simbólico en los niños ofrece más beneficios en su crecimiento, los cuales mencionaremos a continuación.

Desde Logos Nursery School, escuela infantil situada en Las Rozas de Madrid, te contamos qué es el juego simbólico y porqué es importante en el desarrollo de los niños de temprana edad a partir de los 2 años.

 

¿Qué es el juego simbólico?

Son aquellas actividades o escenarios en los cuales los niños se imaginan situaciones o personajes cotidianos, pudiendo emplear la simulación de objetos o juguetes. Básicamente, consiste en juegos de roles donde los niños desarrollan su imaginación.

Les permite manejar la interpretación de símbolos que representan la realidad del juego. Por lo general se presenta a partir de los 2 años, sin embargo, desde temprana edad se busca desarrollar este tipo de juegos para un mejor aprendizaje.

Al inicio del desarrollo del juego simbólico, el niño/a establece un juego base donde él es el único personaje. Después con su crecimiento, este juego se va complicando hasta agregar la presencia de otros personajes para ser una actividad compartida.

 

¿Cuáles son sus beneficios en el desarrollo de los niños?

Principalmente, les ayuda a reconocer su entorno de manera que sean conscientes de dónde están. De esta forma, los juegos simbólicos permiten a los niños:

  • Desarrollar su comunicación con sus semejantes.
  • Fomentar la creatividad.
  • Le permite crear representaciones mentales de la realidad como de su imaginación.
  • Desarrollarse emocionalmente.
  • Ayudar a su desarrollo motriz.

De igual forma, es considerado un entrenamiento que los prepara a la hora de solucionar problemas en la vida real. Este se puede fomentar a través del uso de objetos cotidianos dentro de un escenario imaginario donde se pueden intercambiar roles.

 

¿Cómo se desarrolla el juego simbólico?

En principio, el niño deberá tener un juego simbólico compartido primero con la madre y padre, para luego hacerlo con sus iguales. El primero se desarrolla desde los 12 meses hasta los 2 años para que a partir de esta edad empiecen a desarrollar sus habilidades sociales.

De esa manera, a partir de los dos años, los juegos simbólicos empiezan a tener mayor complejidad que los ayudará en un mejor desarrollo creativo. Teniendo esto en cuenta, el juego simbólico puede ser decisivo en la socialización de los niños a temprana edad.

 

¿Por qué es importante el juego simbólico en los niños?

Para empezar, les ayuda a exponerse a situaciones cotidianas que se pueden presentar en su alrededor, de manera que entienda mejor a lo que le rodea. Asimismo, es una gran herramienta que les permite a los niños proyectar miedos, tensiones y conflictos.

De esta manera, el juego simbólico les ayuda a expresar sus sentimientos de manera saludable y controlada. De igual forma, enriquece su conocimiento social al permitirle interactuar con semejantes; algo muy importante para su desarrollo personal con otros niños.

Por otro lado, el juego simbólico le permite a los niños a fomentar su autonomía, su curiosidad y a aprender a respetar las normas. Todo esto es gracias al espacio donde puede entender los roles de las personas en su entorno.

 

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