La asfixia por atragantamiento es un temor al cual están sometidos muchos padres, y no les falta razón. Según datos de la Cruz Roja esta es la tercera causa de muerte no natural en España. Sin embargo, muchos de estos accidentes pueden evitarse aplicando una técnica de primeros auxilios conocida como la maniobra de Heimlich.
Sin duda, conocer esta maniobra permitirá tomar acciones inmediatas y efectivas para evitar muertes o cualquier lesión grave en los niños. Es vital estar al tanto de este procedimiento y saber cómo se lleva a cabo en los bebés, además de entender lo que no se debe hacer.
¿Qué es la maniobra de Heimlich?
La maniobra de Heimlich es una técnica de primeros auxilios que consiste en la desobstrucción del conducto respiratorio en el caso de producirse un atragantamiento por un cuerpo extraño o comida. Consiste en realizar una comprensión firme abdominal justo debajo de las costillas con el fin de que la persona expulse aire de los pulmones y pueda evacuarse el objeto. Pero hay que tener en cuenta que esta maniobra tiene otra manera de aplicarse cuando se realiza en niños menores de un año.
¿Por qué se llama así?
La maniobra de Heimlich debe su nombre al médico estadounidense llamado Henry Heimlich quien la desarrolló en 1974. Este procedimiento tuvo cierta polémica en sus inicios, ya que, por aquel entonces lo más común era darle palmadas fuertes en la espalda o introducir los dedos en la garganta de la víctima para evitar su asfixia, pero Heimlich consideraba que esto lo que conseguía era introducir aún más el objeto en la garganta.
La maniobra de Heimlich en bebés
La maniobra de Heimlich, tal como se conoce, se lleva a cabo colocándose detrás de la persona y abrazándola con ambas manos por encima del ombligo para aplicarle presión, pero este sistema no es recomendable para niños menores de 1 año.
La maniobra de Heimlich en bebés, que sufran atragantamiento, se debe llevar a cabo siguiendo los siguientes pasos:
- Se coloca el bebé boca abajo, apoyado en el antebrazo o muslo del adulto en forma transversal.
- Con la misma mano se sostiene su cabeza y se sujeta su mandíbula.
- Con la otra mano se dan 5 palmadas entre los dos omoplatos, con una vía de escape lateral, evitando golpear la cabeza.
- A continuación, se gira al bebé con mucho cuidado sujetando su cabeza.
- Si el bebé no reacciona, el adulto debe colocarle dos o tres dedos (preferiblemente el dedo índice y corazón) debajo de la línea del pezón y realizar 5 compresiones lentas y profundas en el centro del esternón.
- Esta maniobra debe alternarse hasta que se produzca la desobstrucción del objeto.
¿Qué no hacer?
La ejecución de la maniobra de Heimlich solo se realiza cuando se está seguro de que el bebé se ha atragantado, siendo indispensable no perder el control de las emociones. Además, si se aplica la maniobra y el bebé no expulsa el objeto, sino que pierde el conocimiento, es vital buscar ayuda para aplicar una técnica de RCP. Durante la aplicación de esta maniobra es necesario revisar constantemente las vías respiratorias y tratar de visualizar el objeto para su extracción.
Si no se puede ver el objeto, no se deben introducir los dedos en la garganta del bebé, sino seguir aplicando la técnica hasta que el bebé respire o llegue la ayuda médica.
Desde Logos Nursery School, escuela infantil situada en Las Rozas de Madrid, creemos que conocer la maniobra de Heimlich, así como otros procedimientos básicos de primeros auxilios, es una forma eficaz de evitar muertes o daños graves de salud, además de generar una conciencia sobre el tema. Es por ello por lo que, son cada vez más los centros educativos que se preocupan en enseñar estas técnicas a sus estudiantes y a la comunidad educativa en general.