¿Aunque son de sobra conocidos, nunca es mala idea recordar los motivos por los que el niño debería practicar la natación? Así pues, aquí los vamos a comentar, sobre todo, centrándonos en los que consideramos más importantes.
Descubre los motivos por los que el niño debería practicar la natación
La natación es un deporte magnífico, pues es muy completo. En contacto con el agua, el pequeño se puede desarrollar de manera óptima tanto a nivel físico como psicológico, por lo que los beneficios son múltiples.
Otro punto positivo de la natación es que puede ser practicada desde edades muy tempranas, ya con un par de añitos. Así se pueden aprovechar las ventajas para que mejore y optimice el crecimiento de la etapa infantil.
Con este ejercicio aeróbico el peque crecerá sano, fuerte y feliz, mejorando el desarrollo de todos los músculos del cuerpo y disminuyendo sus niveles de estrés a la vez que relaja la mente.
Es magnífica para prevenir enfermedades
En efecto, no solo mantiene al niño en plena forma física, también ayuda a prevenir enfermedades muy comunes, sobre todo en el ámbito respiratorio. Por ejemplo, es bastante útil para reducir la posibilidad de sufrir alergias o asma. Las investigaciones muestran que, de hecho, los chicos que son asmáticos, también mejoran en este caso, pues aumenta su condición pulmonar.
No obstante, no es la única ventaja en este punto. También ayuda en el caso de las afecciones cardiovasculares. Aumenta la capacidad coronaria y reduce la posibilidad de que suban los niveles de colesterol en sangre.
Por último, recordar que también ayudará en trastornos graves, como el padecimiento de diabetes. Nuevos estudios dicen que minimiza la posibilidad hasta en un 10%, ya sea natación, o algún tipo de ejercicio periódico.
Estímulo para el desarrollo físico
La natación es una práctica fantástica para estimular el desarrollo del sistema muscular del cuerpo humano. Por eso, cuando el niño está en pleno desarrollo, es una práctica ideal para ayudarle a crecer más y mejor.
También, a su vez, permite mejorar la fuerza, que aumenta de forma notable, así como el equilibrio y la coordinación, de manera que los peques disponen de un físico envidiable que evita la aparición de posibles enfermedades musculares.
Y es que, sumado a lo ya reseñado, también es la natación una práctica ideal para fortalecer el sistema inmunitario de los niños, en especial, cuando la practican desde muy pequeños, cuando apenas tienen 2 años, momento en el que dicho sistema está en pleno desarrollo y necesita todas las ayudas que podamos prestarle.
Mejora del desarrollo social infantil
Gracias a la natación los chicos pueden mejorar también sus capacidades socializadoras. No olvidemos que es un deporte que, aunque es bastante individual, siempre se practica en grupo.
La natación es una actividad interesante para que el pequeño comparta con otros chicos de su misma edad, conociendo otras personalidades, otras formas de ver el mundo y, en definitiva, aprendiendo juegos y disfrutando con otros chavales con intereses similares.
Este deporte favorece un ambiente agradable, asociado al ejercicio físico y a la vida sana, lo que resulta una diversión positiva para el pequeño, para que descubra poco a poco junto con otros muchachos la importancia de la actividad, permitiendo a su vez una mayor integración y un sentimiento de valoración en conjunto junto con sus iguales.
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