Una de las misiones que tenemos como padres es generar hábitos positivos en nuestros pequeños y uno de ellos es el orden y la organización, de esa manera el día de mañana podrán afrontar su vida de una forma más organizada. Si les enseñamos desde niños a cómo organizar su habitación, sus juguetes, su material del colegio, etc, empezarán a integrarlo en su rutina y obtendrán una disciplina que les ayudará en el futuro.
Descubre algunos consejos para ayudar a que los niños sean organizados
No obstante, vamos a dejar algunas herramientas que pueden servir para conseguir que el niño aprenda a ser más ordenado para así conseguir mejorar la convivencia en casa, ser más independientes, sumar en las tareas del hogar y/o tener hábitos más disciplinados. Así también evitamos que en un futuro pueda tener dejadez y potenciamos positivamente su organización.
Ayudar al niño al principio hasta que consiga hacerlo solo
Para enseñarle cómo hay que hacer las cosas debemos acompañar al pequeño al principio y ayudarle en todo lo que necesite hasta que aprenda el hábito que le estamos enseñando y consiga valerse por sí mismo.
Hacerlo formar parte de las tareas del hogar
Como parte de la unidad familiar, debemos incluirlo en las tareas domésticas, de forma que él se pueda sentir más integrado en casa y aprenda cierta responsabilidad en el hogar desde pequeño. Puede empezar colaborando en tareas sencillas como poner la mesa, ayudar a los mayores a hacer la cama, tender la ropa después de lavarla, ordenar los cojines, etc. Y en función de la edad puede ir aumentando su implicación en dichas labores.
Asignar un sitio para cada objeto y que él lo interiorice
Es importante que cada cosa tenga un sitio y el niño aprenda dónde está, ya que si lo vamos cambiando de lugar podemos romper esa organización que buscamos generar en él. Además, es una forma de que siempre sepa dónde van a estar sus cosas y dónde las tienen que poner de nuevo al recogerlas. También es esencial que los lugares que asignemos sean siempre accesibles para el pequeño, ya que si utilizamos estanterías altas o sitios más dificultosos van a necesitar nuestra ayuda constantemente al no estar a su alcance.
Establecer una serie de rutinas en su vida
No solo se ha de ser ordenado con los juguetes o colaborar en casa para establecer un orden en su vida, sino que también se aprende a ser disciplinado a través de los hábitos saludables que el niño tiene durante su día a día. Generar una rutina en él desde pequeño sirve para que el día de mañana él mismo se cree la suya propia. Esto lo podemos conseguir a través de que haga las cinco comidas al día, se limpie los dientes después de cada comida, guarde sus cosas en la mochila antes de ir al cole, ayude a poner la mesa y a quitarla, haga los deberes a cierta hora para luego tener el resto de la tarde libre, ducharse por la noche, irse a dormir temprano, etc.
De esta manera él integra estas funciones en su rutina como si fuese natural y se siente realizado al final del día al saber que ha hecho todo lo que tenía que hacer.
Ser un ejemplo para él
Por último y no menos importante, si queremos que el pequeño aprenda el hábito del orden, los mayores debemos predicar con el ejemplo y ejecutar también en nuestras vidas todo lo que le estamos enseñando, ya que al ser sus modelos a seguir, repite lo que visualiza en nosotros.
Desde el gabinete psicopedagógico especializado de Logos Nursery School Guardería de Las Rozas de Madrid podemos ayudarte para lograr que el niño aprenda de forma sana a tener orden en su vida y se desarrolle de forma adecuada, en plenitud psicológica y física.